Ilustración © Poppy Violá

Reflexión matutina | El lugar donde vivimos es una extensión de lo que somos, hacemos, pensamos, de nuestro pasado, presente y futuro. Asegúrate de que tu hogar sea tu santuario. Aunque tu vivienda sea alquilada, pequeña, sencilla, no deja de ser TU hogar. No vivas en un chiquero, por favor, entre el desorden y la desidia. No te dejes contagiar por la depresión crónica que vive buena parte de la humanidad. Quién puede ser feliz, sonreír, conseguir inspiración y una vida con abundancia económica si ni siquiera puede edificarse un hogar digno para si misma/o. Respétate. Manos a la obra.

El tipo de caos en el hogar al que me refiero es un síntoma del abandono que ejecuta una persona hacia sí misma en su vida en general. Hace poco fui a una casa de un amigo y tenía colgado en su cocina un calendario sucio, grasiento, del año 2005. ¿2005? ¿What? 7 años lleva eso colgado allí… lo siento pero eso es un síntoma de desidia y depresión emocional. Es más fácil verlo en los demás que en uno mismo, pero todos hacemos ese tipo de actos que honestamente no ayudan a nadie.

Si me pongo un poco más aguda este tipo de caos es (auto)violencia.

Nadir Chacín

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1 comentario

  1. Comprendo lo que dices perfectamente. Hasta hace unos meses tenía mi habitación hecha una leonera, aunque sin llegar al caso de tu amigo:) Estaba preparando mi proyecto de fin de máster y no sabía por qué, pero no podía continuar, se me había ido la inspiración. Entonces me dediqué toda una mañana a tirar lo que ya no servía y a arreglar armarios. Tiré muchas cosas y la ropa la doné a una ONG. Desde entonces tengo la necesidad de limpiar y ordenar muy a menudo, como debe ser. Y en el cajón de mis potingues -cremas y maquillaje- vuelco todo mi afán de súper maniática de orden, no sé el motivo :)

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