Me gusta Saramago. Digan lo que digan. Supongo que quien escribe así nunca deja de hacerlo, ni estando muerto.
«¿Cómo es posible contemplar la injusticia, la miseria, el dolor sin sentir la obligación moral de transformar eso que estamos contemplando? Cuando observamos a nuestro alrededor vemos que las cosas no funcionan bien: se gastan cifras exorbitantes en mandar un aparato a explorar Marte mientras cientos de miles de personas no tienen para alimentarse. Por un cierto automatismo verbal y mental hablamos de democracia cuando en realidad de ella no nos queda mucho más que un conjunto de ritos, de gestos repetidos mecánicamente. Los hombres, y los intelectuales en tanto ciudadanos, tenemos la obligación de abrir los ojos.» Publicado en Librínsula
José Saramago
Gracias ti, Davo, por tu comentario.
Así seguirá siendo…
Nadir
Triste, certero, responsable… Así es, y seguirá siendo Saramago.
Elegiste un buen texto. Gracias por compartirlo.