Entrego mi corazón y mi voluntad activa a tratar de entender/comprender/aceptar/valorar a quienes hacen su mejor esfuerzo para ABRIR su corazón, para acompañarme y acompañarnos mutuamente en la búsqueda amable de la Verdad; esta Verdad insondable, misteriosa y valiosa que llamamos «la condición humana», incluyendo todos las consecuencias que esta empresa traiga consigo.
Entrego la paz que soy capaz de encontrar dentro de mí esta mañana gris… sea mucha o poca, limpia o revuelta, estable o chispeante, completa o medio rota, bien o mal vista por los demás; la entrego a quienes están buscando la paz como yo… sea por el camino correcto o incorrecto… la entrego a quienes están hartas/hartos del sufrimiento propio y del ajeno, a quienes están hastiadas/hastiados de sentirse «patitxs fexs» en un mundo incompasivo y cruel… sí, tienes razón así es/está el mundo. No obstante, ¿es el mundo un «algo» que se crea solo? ¿o es el reflejo de nuestras maneras de actuar/observar/materializar la vida y la convivencia entre seres vivientes?
Entonces… nos preguntan quienes ya han encontrado una paz + genuina dentro de sus corazones a través de la historia de la humanidad: ¿cuál camino es el correcto, cuál es tu legítimo camino, el tuyo, el nuestro como especie?». «¿Qué [palabrota] queremos hacer con nuestras vidas [sí, con la tuya]… para qué y cómo queremos utilizar el valioso tiempo que nos han regalado para habitar estos cuerpos efímeros aquí y ahora?… siguen preguntando a las 3 de la madrugada, a las 10 de la mañana… y a todas horas… esas/esos que ya han visto las cosas como realmente son. >> **Sin vendas en los ojos**
Vengo a entregar mi corazón, cual si cantara el mismísimo Fito Paez [escúchalo > http://ow.ly/E35HW] desde adentro de mis entrañas… vengo a entregar mi corazón a las personas de todo el Planeta Tierra, sin distinciones, a ellas/ellos… a quienes se siguen despertando todos los días, con dudas dolorosas o sin ellas, con depresión y ansiedad o sin ellas, para tratar de (re)construir de la forma que mejor pueden sus vidas con las herramientas que en el presente saben/tienen.
Estas personas, todas/todos, reciben mi corazón ahora por esta vía en las condiciones es las que mi corazón está [por ahora quebrado], reciben mi aprobación de la mejor manera que puedo darla y reciben mi respeto -o lo que yo creo es el respeto, lo reciben si encuentran la paz o si no la encuentran… lo reciben aunque usen métodos y vías que en este día NO ENTIENDO.
Entrego mi corazón a ellos/ellas… lo entrego haciendo la más sublime apuesta por sanar mis heridas al mismo tiempo… lo entrego para dejar a un lado las proyecciones mías que veo en sus rostros, en sus pensamientos y en sus actos. Estoy aquí con todo mi Ser [siendo], a ratos y de manera cambiante, moviéndome entre la ignorancia y la sabiduría, entre la altivez y la sencilez… viajando de la Oscuridad a la Luz y viceversa… debatiéndome entre la certidumbre y la incertidumbre.
Entrego «Todo» y «Nada». Lo entrego para ti que me lees (gracias), para ti que me conoces en persona o a través de internet, para ti que no te enteras de lo que escribo porque no tienes Internet… Lo entrego. Que estén todas/todas bien en este noviembre otoñal [de limpieza y purificación], que sean felices pase lo que pase. ¡Namasté!
Dedico esta luz a Venezuela, a México, a Cataluña, a España y a todos los países donde hay personas sufriendo por la violación de los Derechos Humanos.
Metta (amor incondicional),
Nadir Chacín
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La Sabia me susurra dulcemente al oído: «buscar es encontrar de algún modo… aunque el misterio siempre continúe».