Las mariposas me confunden

En el mes de mayo en Madrid se dictó el curso «Las mariposas me confunden. Nuevas narrativas y prácticas sobre el discurso amoroso» en el que participaron Irantzu Varela, Laura Latorre, Roma de las Heras, Pamela Palenciano, Miguel Vagalume y Brigitte Vasallo. Organizado por Laura Latorre, quien merece una ovación de pie.

Las mariposas me confunden
Foto de @irantzuvarela

Me enteré ayer de que sus participaciones se grabaron y se subieron a Soundcloud. ¡Gracias, Siglo XXI! Es una muy buena noticia que hayan liberado estos contenidos. Gracias a todes.

Voy a subir cada audio acompañado de una breve biografía de cada une de les invitades. Son personas a quienes leo y admiro mogollón por su capacidad de (re)pensar las relaciones humanas, especialmente las llamadas «románticas». Publicaré los contenidos en el orden del propio curso.

Espero que algún día estas personas que habitan mis querencias vengan a dictar un curso similar en Barcelona. Estaré sentada en primera fila.

Irantzu Varela

Periodista y feminista. Coordinadora de Faktoria Lila, presentadora de Aló Irantzu en Pikara Magazine y creadora del espacio El Tornillo en La Tuerka TV y Publico.

Laura Latorre, organizadora de «Las mariposas me confunden»

Autora del libro «Polifonía amorosa». Educadora social y terapeuta narrativa. Su trayectoria profesional se ha encaminado hacia la intervención, desde una perspectiva feminista, para cuestionar y erradicar la violencia contra las mujeres.

Gracias, Laura, por el currazo de organizar «Las mariposas me confunden».

Roma de las Heras

Activista de las relaciones no convencionales, lesbiana, transfeminista, sexóloga y provinciana migrada a Madrid. Está detrás de «Repensando los amores«, una programación cultural de actividades para aprender y pensar en común sobre cómo construimos nuestros vínculos desde una perspectiva feminista.

Miguel Vagalume

Terapeuta sexual y de relaciones. Activista de las identidades, prácticas sexuales y relaciones no convencionales como «La mosca cojonera» desde 2006 en su blog en Golfxs con principios. Ha traducido textos fundamentales sobre relaciones abiertas y sexualidades no convencionales: «Ética promiscua», «Opening up» o «Más allá de la pareja» («More than Two»).

Pamela Palenciano

Autora y actriz del monólogo «No sólo duelen los golpes«, en el que propone – desde una experiencia de pareja en la que vivió maltrato, abuso y sometimiento al poder y la violencia de la masculinidad patriarcal- una mirada al tipo de relaciones que mantenemos en el marco del patriarcado, construyéndolas y padeciéndolas.

Brigitte Vasallo

Escritora, profesora y activista antirracista, feminista y LGBTI española, conocida especialmente por su crítica de la islamofobia de género, la denuncia del purplewashing y el homonacionalismo, así como por su defensa del poliamor en las relaciones afectivas. Su último libro es ‘Pensamiento monógamo, terror poliamoroso’.

Irantzu Varela dice en su ponencia «Las mariposas en el estómago no son amor, son ansiedad».

Estoy totalmente de acuerdo.

Si no nos ponemos a construir estilos de vida más amables que incluyan la corresponsabilidad social en las tareas de cuidados de las personas dependientes (niñes y ancianes) vamos a terminar viviendo en un mundo-humanidad abandonada que (nos) abandona a todes. Una realidad fantasmal.

La mayoría de la gente no lo nota siquiera, pero el abandono social de algunos grupos vulnerables (como las mujeres ancianas) está relacionado directamente con el discurso amoroso hegemónico.

Lo personal es político.

El amor es político.

Las narrativas y las prácticas hegemónicas del discurso amoroso siguen impregnando de sentido al mismo sistema de opresión y control de toda la vida, ese que tiene mil «tentáculos»:

  • La ideología monógama. El «me gustaría conocer a una persona especial» de la mayoría de los perfiles del Tinder o de cualquier otra app de dating. ¿Es que no se cansan de repetir esa frase?
  • La insistencia de que las casas y los pisos tengan una habitación grande (la matrimonial) y otros cuartos «menores». ¿Acaso el co-lecho es obligatorio? ¿Es que no se puede ser pareja sin dormir en la misma cama?
  • El diseño de las ciudades basado en el modelo de familia tradicional y hegemónico. Intenta buscar un piso con dos cuartos grandes con baño propio y verás el resultado.
  • La violencia hacia las mujeres y hacia sus cuerpos. El «Si no es conmigo no es con nadie» de los feminicidas. El caso de «La manada» y sus repeticiones. La mujer de la empresa IVECO.
  • La Escuela y las dinámicas normalizadoras del sistema educativo. ¿Aún no se enteran de que hay millones de formas diferentes de aprender y de que cada persona es «un mundo»?
  • El individualismo (neoliberal), cada quien mirándose el propio ombligo y diciendo que el dolor ajeno le es ajeno. A menos de que el dolor le duela a alguien de SU familia.
  • La jerarquización de las relaciones de pareja (y de «familia nuclear») sobre el resto de las relaciones humanas. ¿Hace cuánto no saludas a tu vecina? Sí, esa misma, la octagenaria que vive sola en la puerta contigua a la tuya.
  • La sexualidad genitalizada, normatizada/mecánica y reproductiva, esa que prohibe el placer, la diversidad y la libertad. «No te muevas mucho en la cama porque te va a preguntar: dónde aprendiste eso.»
  • La insistencia absurda de que para ser una persona «adulta» y «madura» hace falta «sentar cabeza» y tener una pareja. ¿Hasta cuándo las mujeres que optamos por no tener parejas seremos «unas locas inmaduras»?
  • El canon esposa/madre que le arranca a las mujeres el derecho a decidir si quieren tener hijes o no. La visión de la mujer sin hijes como una mujer incompleta o rota o averiada. «Si no tienes hijes ahora te arrepentirás y luego aunque quieras ya no podrás tenerlos.» El tic-tac del supuesto reloj biológico.

¿Qué piensas tú?

Yo lo tengo clarísimo. Las mariposas no me confunden. Necesitamos un cambio urgente de paradigma relacional y que sea colectivo. Y lo necesitamos ya.

Empieza por preguntarte a ti misme: ¿por qué y para qué tienes (o deseas tener) relaciones sexo-afectivas o «románticas»? Déjame un comentario en este post y lo leeré y responderé con detenimiento.

¿Cuando lees «Las mariposas me confunden» qué te viene a la cabeza? ¿Qué te recuerda?

Te pido que por favor compartas estos contenidos tan valiosos con tus amigues en redes sociales. Espero que mucha gente se anime a escuchar estos audios. Gracias.

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1 comentario

  1. […] Cuando decimos que alguien está como está porque no ha sido capaz de estar de otra forma (que SIEMPRE es nuestra forma) y desconocemos las condiciones y los contextos en los que esa persona ha sido/ha estado o es/está: estamos cosificando su sufrimiento. Estamos abandonando a esa persona a la cruel intemperie del mercado (que SIEMPRE es el mercado de los afectos). […]

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